En esta temporada de lluvia, los bebés y adultos mayores que habitan la zona sur del Estado de México, son los más propensos a perder la vida por picadura de alacrán de la especie Centruroides Limpidus, mejor conocido como güero, esto en caso de no ser atendidos médicamente en las primeras 12 horas.
La mayor incidencia de picadura se registra en municipios que colindan con los estados de Guerrero, Michoacán y Morelos, es decir, en la región de Tierra Caliente donde se cita a Luvianos, Tejupilco, Amatepec, Zacazonapan, San Simón de Guerrero y Temascaltepec, entre otros.
En todos los centros de salud de esa región mexiquense hay en las unidades médicas suficiente antídoto, incluso, comuneros y comuneras han sido capacitadas por el sector salud estatal para que sepan aplicarlo en caso de una emergencia, como puede ser en la noche o que el consultorio esté muy lejos de la localidad donde se registra el incidente, indicó Alberto Contreras Galindo, jefe del departamento de Zoonosis y Vectores del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM).
El experto exhortó a que no se apliquen remedios caseros a la persona que ha sido picada por alacrán, “que lo único que hacen es complicar la intoxicación porque pierde uno tiempo muy valioso y la sustancia que se ponen muchas veces dañan más que el propio veneno”.
Al citar que el alacrán que predomina en la zona sur estatal puede ir en todo tipo de mercancía, la actual temporada de lluvias es la propicia para este animal ponzoñoso, “el veneno en los bebés y en los adultos mayores es más peligroso por su condición, es por eso que tienen que recurrir lo más pronto posible a solicitar atención médica, podemos actuar en las primeras 12 horas sin poner en riesgo la vida de las personas”.
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