Mientras son peras o son manzanas, en la Secretaría de Educación Pública (SEP) ya se están preparando para seguir con normalidad ante un cambio en la dirección con motivo de las elecciones a gobernador en el Estado de México en 2023. Un acontecimiento toral para la consolidación de la Cuarta Transformación, y en contraste, para la oposición este estado significará la línea de defensa contra el obradorismo.

Es por ello que en las definiciones ya hay nombres sobre la mesa, como el de Guillermo Narváez Osorio, a quien hace dos semanas llamaron al Palacio del Cobián. Así lo hizo saber el equipo del secretario Adán Augusto López, según lo cual el rector de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco es la propuesta del titular de la Segob en caso de que Delfina Gómez se vaya de campaña al Estado de México.

En el Gabinete, como es sabido por el círculo rojo, la texcocana espera la definición final del presidente López Obrador. Jesús Ramírez Cuevas ya tomó el control de su campaña rumbo a 2023, teniendo como garantía que no hay más aspirantes en la baraja de Palacio. Contra la promoción que hace Ricardo Monreal de la postulación del senador Higinio Martínez, Delfina cuenta con la plena confianza de AMLO.

Según se cuenta entre los círculos del morenismo mexiquense, con disciplina Delfina Gómez acató la orden del entonces líder de Morena para que aceptara la derrota frente al priismo de Enrique Peña Nieto en 2017, quien veía no sólo como una afrenta sino como una abierta humillación que el partido recién creado de López Obrador le arrebatara su bastión político, esto en un proceso electoral marcado por las irregularidades.

AMLO aceptó ceder en el Estado de México a cambio de que la Presidencia de la República no metiera las manos en el resto del país en 2018. Un trato que resultó justo para ambos, y al que en su momento se conoció como PRIMOR. Sin embargo, no hay deudas ni de un lado ni de otro, y el Palacio de Gobierno en Toluca está a la vuelta de la esquina. Esto también lo sabe Delfina, y así se explica su distanciamiento con la tribu de Higinio.

Aunque contrario a lo que se cree, el Grupo Acción Política (GAP) está en crecimiento -lejos del estado desahuciado que aseguran algunos- y el presidente López Obrador ya encargó a un miembro distinguido la gestión legislativa de su segunda iniciativa de reforma constitucional en materia electoral. Se trata de Horacio Duarte, un funcionario federal, antes diputado federal, quien también sueña con la gubernatura del Edomex.

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Por ADX

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